Disonancia cognitiva, autoengañarse
La disonancia cognitiva, ese autoengañarse, reduce estrés, lo que fortalece el vínculo con tu abusador/a hasta el punto de llegar a defenderlo.
La Teoría de La Disonancia Cognitiva fue desarrollada por el psicólogo Festinger en 1957 y puede definirse como la incomodidad, tensión o ansiedad que experimentan los individuos cuando sus creencias o actitudes entran en conflicto con lo que hacen. Este displacer puede llevar a un intento de cambio de la conducta o a defender sus creencias o actitudes (incluso llegando al autoengaño) para reducir el malestar que producen.
Te autoengañas, aceptando la mentira como verdad
En tu cerebro han convivido dos ideas o cogniciones diferentes e incompatibles: una es que tu madre/pareja te quiere, y la otra es que tu madre o pareja te hace daño.
Estás acostumbrada a que tu madre o pareja (la persona abusadora en tu vida) te diga una cosa y luego haga otra. Te han podido decir que te quieren, sin embargo, te han dejado en la cama enferma sin mucha atención. Te han prometido algo que querías, pero a la hora de la verdad no te lo han regalado.
La disonancia cognitiva es un sentimiento horrible, porque te deja en un estado de confusión, limbo e incomodidad.
Las víctimas de la disonancia cognitiva a menudo sienten que se están volviendo locas, vuelven la disonancia cognitiva sobre sí mismas, se culpan por ello y creen que es solo un factor más que prueba que son la persona loca e inestable que su madre les acusa de ser.
Los investigadores creen que los terribles sentimientos asociados con la disonancia cognitiva son la razón por la cual las víctimas de abuso continúan en la relación con el abusador.
La decisión que la víctima toma a menudo es la vía que ofrece menos dolor emocional. Para las víctimas del abuso, la seguridad emocional y física es fundamental. Por ello hacen todo lo que esté a su alcance para complacer a la persona abusadora. En lugar de enojar a su madre o su pareja, harán lo que esta les pida, porque así estarán a salvo.
Por lo tanto, a menudo hacen la vista gorda ante el abuso, niegan lo que creen que podría ser la verdad, se convencen de que todo está en su cabeza, y toman la decisión de creer que su madre o pareja abusiva realmente las ama.
Recuerda que el amor de verdad no duele. Debes de escribir todo lo que sientes, lo ahogada que vives, lo miedosa que eres, y empezar a culpabilizar a quien corresponde, no a ti.
Si quieres superar la disonancia y las demás secuelas del abuso narcisista, como depresión, distorsión cognitiva, culpa, vergüenza… te dejo los libros guía con ejercicios prácticos que te van a ayudar como me ayudaron a mí y otras miles de personas más.
NO OLVIDES QUE MERECES SOLO AMOR.